martes, 17 de agosto de 2010


- Yo no puedo salir de casa a las cuatro de la mañana cuando estés mal y necesites un abrazo.
- No te he pedido que lo hagas.
- Ya...
- Yo lo haría por ti.
- Pero...
- Vale, joder, sé que tú no lo harías por mí. Lo sé, vivo con ello desde hace mucho tiempo.
- Es que... no lo entiendo. Creo que cuando no puedes dormir porque estás mal y necesitas un abrazo, lo mejor que se puede hacer es acostarse y a la mañana siguiente descubrir que ya ha pasado todo.
- No tienes ni idea. Cuando estás rota lo único que necesitas es volver a sentir, y una de las maneras de vovler a hacerlo es poder abrazar a alguien. ¿Te has sentido jodidamente sola, destrozada, pisada, vacía y muerta? ¿Tú has estado rota? ¿Sabes lo que significa eso?
- No...
Supe que había conocido mejor que nadie el dolor de mi existencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario